Es algo que siempre me ha fascinado...las casualidades.
O tal vez debería llamarlas carambolas del destino??? No se, pero el caso es que en el fondo me entusiasman.
A veces no te das cuenta y por una de esas casualidades tu vida da un giro inesperado. Conoces a alguien, vas por una calle en vez de por otra y ahí esta...tu vida cambia.
Pero cuando sabes que esa decisión, ese encuentro, son importantes? nunca lo sabes y a veces ese no saber se convierte en un esperar absurdo.
Yo me he pasado mucho tiempo pensando que a mi no me pasaban esas cosas y al final resulta que estoy donde estoy y conozco a quien conozco por una tontería del destino. Simplemente me senté un día en clase con alguien que años mas tarde me ayuda tomar una decisión. A lo mejor si me hubiera sentado en otro sitio no viviría donde vivo o no hubiera conocido a la persona más importante de mi vida.
Pero también podría estar viviendo una vida mejor, en un sitio mejor, con el verdadero amor de mi vida, al que puede que no conozca por tomar una decisión tan trivial en el instituto.
Y puedo seguir dándole vueltas de rosca al asunto. A lo mejor la verdadera casualidad está aún por llegar y mientras tecleo estas letras mi destino va tomando forma y cuando menos me lo espere ahí estará la nueva oportunidad, la nueva decisión intrascendente que cambiara otra vez mi vida.
Quizás para mejor...quizás para peor.
Así que seguiré esperando otro poco más a que llegue ese momento, porque haga lo que haga siempre habrá una decisión que tomar...
O tal vez debería llamarlas carambolas del destino??? No se, pero el caso es que en el fondo me entusiasman.
A veces no te das cuenta y por una de esas casualidades tu vida da un giro inesperado. Conoces a alguien, vas por una calle en vez de por otra y ahí esta...tu vida cambia.
Pero cuando sabes que esa decisión, ese encuentro, son importantes? nunca lo sabes y a veces ese no saber se convierte en un esperar absurdo.
Yo me he pasado mucho tiempo pensando que a mi no me pasaban esas cosas y al final resulta que estoy donde estoy y conozco a quien conozco por una tontería del destino. Simplemente me senté un día en clase con alguien que años mas tarde me ayuda tomar una decisión. A lo mejor si me hubiera sentado en otro sitio no viviría donde vivo o no hubiera conocido a la persona más importante de mi vida.
Pero también podría estar viviendo una vida mejor, en un sitio mejor, con el verdadero amor de mi vida, al que puede que no conozca por tomar una decisión tan trivial en el instituto.
Y puedo seguir dándole vueltas de rosca al asunto. A lo mejor la verdadera casualidad está aún por llegar y mientras tecleo estas letras mi destino va tomando forma y cuando menos me lo espere ahí estará la nueva oportunidad, la nueva decisión intrascendente que cambiara otra vez mi vida.
Quizás para mejor...quizás para peor.
Así que seguiré esperando otro poco más a que llegue ese momento, porque haga lo que haga siempre habrá una decisión que tomar...
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